El pasado fin de semana con todo el tema del Black Friday y el Ciber Monday el número de pedidos se ha incrementado, dicen que es el día que más compras se realizan y si el comercio no está preparado para ese volumen tendrá retrasos en las preparaciones de los paquetes y sobretodo en las entregas en el plazo estimado. Algo que a más de uno, le empezará a pasar factura cuando vea que llegan las navidades y no hayan recibido aún sus paquetes.
Tipos de envio.
Cuando compramos por internet tenemos varias opciones para seleccionar el tipo de envío que queremos recibir, que podríamos resumir en menos tiempo más dinero y más tiempo menor precio.
El ya me llegará
Podríamos clasificar las opciones en 3 grandes bloques, el más básico, no pago y me tarda en llegar hasta dos meses, es el caso de Aliexpress, que sabes cuándo lo has pedido, pero no cuándo te llegará, por norma general, suele tardar entre 3 y 4 semanas en llegar, si lo que hacemos lo compramos en estos períodos de compras, se puede alargar hasta casi 3 meses.
Sé cuándo me va a llegar
Otro de los modelos, es intermedio y es que paguemos o no los portes, nos llega en un plazo razonable, que puede oscilar entre una semana o dos semanas.
Según lo compro, ya lo tengo
En esta línea los grandes centros de compra como puede ser Amazon o si me apuras El Corte Inglés, se esfuerzan en que las compras lleguen en cuestión de horas a nuestras casas, siempre y cuando estemos en su rango de actuación. En el caso de la española se esfuerza en dar la opción de tener el pedido llegue en dos horas dónde queramos pagando un suplemento si lo queremos recibir así de rápido.
Este tipo de compañías se apoyan en otras empresas de paquetería en función del volumen de pedidos que tengan, en muchos casos de otras grandes compañías que todos conocemos, pero también se apoyan en proyectos más colaborativos, en los que el usuario decide cuándo y dónde está dispuesto a entregar un paquete.
¿Hacia dónde va la logística?
Los grandes e.commerce se han puesto las pilas -y mucho- en las entregas de las compras que se realizan en sus plataformas, y de la que siempre estamos escuchando hablar es Amazon, porque se esfuerza en aportar ideas que mejoren los plazos de entrega.
Del almacén a casa en dron.
Una de las ideas a las que más recorrido les queda es la del uso de drones para entregar paquetes, digo que tiene gran recorrido porque algunas de las necesidades de los drones hacen que todavía no esté desarrollado. Una de ellas es el tamaño y el peso del paquete, cuánto mayor sea, menor recorrido podrá tener el dron.
Por otro lado, es el espacio dónde aterriza un dron, y es que por ejemplo en EEUU se han planteado que el sitio dónde pueda aterrizar sin riesgo, lo que se traduce en tener unos metros cuadrados de jardín.
Lo que hace que en España estemos muy lejos de conseguir este tipo de entregas teniendo en cuenta que prácticamente la mayoría de nosotros vivimos en edificios o bloques de edificios…Aunque quizá una buena solución sería adaptar las azoteas, en el caso de ser planas, como centro de recepción de drones de los vecinos. ¿Quién sabe lo que nos depara el futuro?
El coche me lo trae
Otra de las ideas que también parecen un tanto futuristas, y que en este caso de Google, es la idea de que sea un coche sin conductor el que nos venga a entregar los paquetes que encargamos por internet. Sin embargo, de momento, es más bien una carrera de larga distancia que tiene bastantes problemas, sobre todo relacionados con la seguridad para que sea realmente práctico utilizar este sistema.
Repartidor particular
La novedad esta semana que anticipa el período de las navidades es el lanzamiento en España del servicio Amazon Flex, un servicio que nace con la finalidad de ofrecer trabajo a personas que sean mayores de edad, que tengan un vehículo propio, que sean trabajadores autónomos y tengan tiempo libre.
De momento lo lanzan, en período de prueba, en Madrid y Valencia, aunque ya funciona con bastante éxito en otras ciudades norteamericanas. Amazon Flex ha creado una página para aportar más información, dónde podremos encontrar dos opciones, la de si vivimos en Madrid o Valencia y para todas las ciudades de España, en la primera, nos pide indicar información relativa a nosotros, digamos que son una serie de parámetros con los que Amazon decidirá si somos candidatos óptimos o no para su empresa. Si nos encontramos fuera, nos añadirán a una lista de espera para cuando introduzcan nuestra ciudad en su plataforma.
El servicio se apoya en una aplicación, en la que el repartidor recibirá notificaciones de paquetes nuevos en su radio de actuación, además le aparecerá el lugar de recogida, así como el de entrega, podrá escanear el paquete, y en definitiva, hará las funciones de cualquier repartidor, con la diferencia, que esto más que un trabajo, lo venden como un complemento para añadir ingresos a final de mes.
Y es que en la propia página de Amazon Flex, ya se anuncia que será de 14 euros la hora, aproximadamente, ya que de ahí, como es lógico los repartidores que pongan a su disposición su coche tendrán que descontar el kilometraje.
Habrá que esperar a qué pase el período de prueba durante estas Navidades para saber si funcionará o no en España el modelo importando de EEUU.