Últimamente estamos acostumbrados a compartir un montón de imágenes que tomamos con nuestros super smartphones. Nos hemos convertido en fotógrafos improvisados y en algunos casos vamos como profesionales, está claro que las redes sociales nos lo han puesto mucho más fácil, no nos vamos a engañar, para crear auténticas imágenes y retransmitir nuestro día a día.
Instagram, un foco para conseguir «me gusta» en función de lo que utilizamos
Instagram ha sido de las primeras apps con las que hemos empezado a sacar nuestras venas más artísticas, los filtros cada vez más sofisticados hacen que nuestras fotos parezcan mucho mejores de lo que realmente son. Sin embargo son tres los que más seguidores o likes nos pueden ofrecer. No es que lo diga yo, es que han demostrado en un estudio que el uso de estos tres filtros, que os concreto a continuación, son los más propicios para destacar entre los millones de usuarios que hay.
En total tenemos a nuestra disposición en Instagram un total de 24 filtros con los que podemos crear imágenes muy buenas, estos filtros se basan en el uso del color, la saturación o la intensidad del brillo, así como otras prácticas más ligadas a la psicología del color.
Son opciones básicas a las que cualquiera que entienda un poco de fotografía podría llegar tocando los ajustes de las imágenes o tirando de Photoshop, sin pasarse, porque parecerían un poco irreales.
Por otro lado, dentro de los filtros que podemos utilizar uno de los que más se utiliza, al menos en EEUU, es el que se denomina Claredon y que consiste en que satura un poco los colores y aplica un balance de blancos más azul, que sea el más utilizado no quiere decir que sea el más eficaz, ya que esa papeleta es para los filtros Juno (que son las imágenes con más likes por lo general) así como el Valencia que en ambos casos la saturación de los colores hace que parezcamos un poco más bronceados y mejor piel, por lo que podríamos a llegar ser más mainstream.
De los me gusta a las imágenes en tiempo real y más cotidianas.
Aunque si hablamos de ser mainstream, o lo que es lo mismo, ser el más moderno de nuestros amigos, la clave pase por hacerse con unas gafas para Snapchat, se llaman Spectacles y tienen un precio que para lo que son, no está nada mal, unos 150€ y sirven además de taparnos un poco del sol, para tomar imágenes y guardar los momentos más especiales que podríamos hacer mientras levantamos las gafas para colocarlas bien encima de la nariz.
Estas gafas son una herramienta bastante sencilla de utilizar, te llegan a casa con un estuche y un cable para que las cargues, obviamente sin batería no funcionarán y tendremos que planificar que usaremos las gafas para que si nos vamos de vacaciones podamos hacer fotos o vídeos de una forma muy rápida y sin problema.
Una vez que las tenemos en casa y cargadas, las podemos empezar a utilizar, para ello, quitaríamos el típico plástico para que se vea, a más de uno le ha pasado que creía que no le funcionaban bien las gafas y que se las tenían que cambiar. Las debemos sincronizar con nuestra cuenta de Snapchat, es la única aplicación con la que funcionan, al menos de momento. Y comenzar a lanzar fotografías a diestro y siniestro con nuestra propia perspectiva.
Los Spectacles graban, como decía antes, Snaps de vídeo en segmentos de 10 segundos. Es decir, si queremos grabar un vídeo de una duración más larga a 10 segundos tendremos que volver a tocar el botón para que se vaya extendiendo de 10 en 10 segundos, al publicarlo en nuestra cuenta de Snapchat, también será en fragmentos de vídeo de 10 en 10 segundos.
Una de las formas de hacerse con ellas, es encontrar unos Snapbots que son como máquinas de vending que irán cambiando de ubicación cada cierto tiempo y de momento sólo en Barcelona, aunque si no vas a ir a Barcelona y las quieres, también se pueden comprar en la web de Snapchat y que nos las traigan a casa.
Las Spectacles están disponibles en España desde hace relativamente poco tiempo, y tomando como referencia EEUU dónde se han vendido ya 100.000 unidades, se espera que sea un objeto de deseo para el verano, aunque la empresa, lo que pretende es posicionarse como algo más que una red social en la que compartimos imágenes, y ya tienen en mente, otro tipo de productos que ayuden a crear contenido más que a difundirlo, como drones o los selfies aéreos.
Por último, tendremos que tener cuidado con lo que vemos y a lo que publicamos, por privacidad, por seguridad para nosotros mismos, vamos la conclusión que siempre sacamos: usar las redes sociales con sentido común.