Desde hace unos días en Facebook se ven publicaciones que hablan sobre la propiedad de lo que compartimos o el coste que va a tener Facebook para garantizar la privacidad del contenido que añadimos a nuestros TimeLines.
El primero de los mensajes se refiere a la privacidad, hay una frase que es bastante graciosa, «el contenido de este perfil es privado y cofindencial» No puede ser privado y cofindencial algo que ven nuestros amigos y quizá muchos de los amigos de nuestros amigos, para cambiar la privacidad debemos ir a la configuración y decidir quién verá ese contenido.
El segundo de los mensajes hace referencia a que si quieres mantener tu privacidad en las redes sociales tendrás que pagar. En Facebook sólo pagan los anunciantes y los que compran a través de la red social, nadie más, jamás han mencionado que costará dinero o que tendremos que pagar un servicio «premium», Facebook tiene otras formas de ingresar pasta, está en bolsa, tiene mucha publicidad y de diferentes formas.
Estos mensajes no son publicaciones de terceros ni de aplicaciones, sino de alguien que se aburría y decidió pasar el rato con un fin algo retorcido, y hubo quién le creyó a pies juntillas, los textos se basan en unas leyes, que para ambos casos son las mismas.
Estas leyes que según la publicación que la gente copia en sus muros, las UCC 1-308-11 308-103 y del Estatuto de Roma no tiene sentido para este caso pues se refieren al genocidio, los crímenes de guerra, crímenes de agresión y los crímenes contra la humanidad. ¿Crees que tiene algo que ver?
Por otro lado, cuando nos damos de alta en alguna de las redes sociales que nos gusta visitar, debemos o por lo menos, deberíamos saber que aceptamos una serie de condiciones y el aviso legal, lo que nadie se lee, una de las cosas que nos dicen es que los documentos (textos, fotografías o vídeos) pueden ser reproducidos de forma pública en algún sitio, lo que no quiere decir que Facebook trafique con tu información, sino más bien algo de sentido común, los servidores dónde subimos la información pertenecen a la empresa y salvo que borremos ese contenido en algún momento estará siempre a disposición de la red social.
Esto puede chocar un poco, los derechos de autor o la indignación de algunos fotogrçafos que han visto alguna de sus fotografías en el sitio más inesperado. Que Facebook sea «dueño» de nuestro contenido tampoco significa que se dedique a venderlo o a difundirlo sin más, debemos saber diferenciar entre lo que ellos «nos roban» o lo que gente sin escrúpulos copia y/o edita del contenido original que alguien creó.
Este tipo de mensajes no son algo característico o que se haya puesto de moda esta semana, sino que son mensajes que llevamos viendo desde hace mucho más tiempo, la verdad es que también han sido pocos los que se han preocupado de explicar que en las condiciones que firmamos al principio, damos autorización expresa para que si a Facebook le da la gana pueda publicar todo el contenido que nosotros hayamos subido a la plataforma social. Insistimos en que otra cosa es que lo hago o se beneficie económicamente de lo que subimos.
La policía ayer publicó que nadie se lo creyera que era un bulo, y menos mal, porque se difundió, al igual que otro contenido, de forma muy rápida por las redes sociales. En cualquier caso, no podemos cambiar con una simple publicación que ni es válida, los términos y la política de la empresa, sino quieres que Facebook tenga acceso al contenido, lo mejor, es que te des de baja.
Esto de darse baja podría tener alguna como consecuencia como no enterarse de lo que les pasa a sus amigos o no acceder a promociones (por ejemplo) para ganar algo, por eso lo mejor que podemos hacer cuando nos damos de alta en una red social es o bien leer las condiciones que nos ponen a nuestra disposición o bien cuidar el contenido que no queremos que nadie más que nuestros amigos tenga acceso, en ese caso lo mejor es usar alguna aplicación tipo Snapchat o evitar subir todo lo que nos pasa en nuestro día a día.
En definitiva y para no enrollarnos más las condiciones de Facebook las escribe Facebook y no porque publiquemos un comentario citando fuentes un poco absurdas para este caso al menos vamos a conseguir cambiar la política de la red social.
Si no quieres que usen tus fotos no las subas a Facebook, busca otros canales para difundirlo.
Y antes de creerte las leyendas urbanas pide consejo o consulta a algún experto que pueda ayudarte o explicarte las condiciones legales o la política de privacidad.