Las redes sociales se han convertido en una parte muy necesaria en la sociedad, para los usuarios en general aporta: ocio, conexión y conversación y para los negocios además añade la opción de vender. Para vender a través de internet la mayoría de las empresas se apoyan en el uso de las comunidades online, bien a través de contenidos interesantes, bien a través de campañas publicitarias, pero en mayor o menor medida, están ahí, con presencia en redes sociales porque saben que son un canal más de comunicación.
Muchas veces hemos comentado que las redes sociales son una extensión de la sociedad, por eso, debemos pensar en que ese espacio de internet es un local comercial en el centro de la ciudad, en el que de vez en cuando pasa gente y echa un vistazo a la tienda y si le interesa algo y le da buen rollo el sitio, entra, pregunta y mira otras cosas disponibles, la atención de la persona que está allí, también es fundamental para que nuestro cliente se sienta cómodo, si el personal huele mal o va manchado, lo más probable es que se vayan a otro sitio a comprar lo que sea. Si trasladamos de nuevo, el ejemplo a las redes sociales se traduce en malas imágenes, en que no nos responden al mail, o porque emiten juicios políticos demasiado arriesgados en sus perfiles…
Comodidad y servicios
La comodidad para el usuario y para el dueño del negocio a la hora de gestionar una tienda on.line es fundamental. Desde el punto de vista del que compra, quiere que sea rápido y con condiciones de envío o devolución gratuitos, por otro el comerciante, necesita por necesidades del día a día, que sea una herramienta que le facilite el trabajo.
Cuando se empezó a hablar que los negocios tenían que tener una tienda online, se decía que la plataforma más completa era prestashop, la verdad que es muy completo, aunque también más complejo. Si tenemos en cuenta que muchas de las tiendas online que se están creando son las del pequeño y mediano comercio, las opciones para integrarlo con las redes sociales van de mal en peor.
Agilidad y transparencia
Como os decía las PYMES son las que están creando sus propias tiendas online, tiendas que probablemente son gestionadas por el propio dueño o algún dependiente de los comercios, esto significa que no hay una persona que trabaje de forma específica en la tienda y necesita herramientas que le ayuden a gestionar y promocionar los servicios y productos que vende.
Por eso, plataformas como Shopify que te ayudan a crear un catálogo en redes sociales a golpe de clic está siendo una de las grandes aventajadas este año, nosotros creamos nuestra tienda en esta plataforma y en cuestión de segundos tendremos una tienda virtual en Instagram o Facebook.
Se traduce en ahorrar tiempo y facilitar la gestión no sólo con los usuarios sino también con las redes sociales y la visibilización de cada producto.
De la promoción a la confianza
Lo primero que alguien tiene que hacer para vender on.line es que se le conozca, como marca o prestador de servicios. Una forma de darlos a conocer es crear además de buen contenido sobre qué hacemos o qué vendemos, campañas de publicidad que deriven a los usuarios de otras páginas web a las nuestras.
Una vez que el usuario accede a la tienda on.line debe sentirse cómodo, ver de forma clara qué, cómo y cuánto: información que parece muy obvia, pero que aún no todos los e.commerces muestran. De poco nos servirá tener una campaña de publicidad con un presupuesto altísimo si después no habrá nadie gestionando los pedidos.
La confianza ¿Cómo se consigue?
En el caso de las tiendas online, además de añadir previo pago certificaciones o sellos oficiales que garantizan la seguridad con la que podemos realizar una compra, también se nutren de otros canales, las redes sociales son un soporte cada vez mayor de atención al cliente. Un apoyo más para vender y quizá no sea tan descabellado contratar a alguien que atienda la tienda online, al igual que se cuenta con dependientes que solucionan y gestionan las visitas a pie de calle.
Por tanto, las redes sociales nos ayudan a vender, pero no venden por sí solas, debemos acompañarlas, cuidarlas y mimarlas al igual que a todos los clientes que nos visitan en un establecimiento. Como usuarios, puede que nos entren dudas a la hora de comprar en internet, por eso, en todos todos los sitios de venta on.line aparece un mail al que podremos remitirnos para preguntar lo que se nos ocurra y que sea relevante, y sino, siempre podrás enviar un mensaje a la marca, a través de las redes sociales, localizarlos no debería resultarte difícil 😉