Muchas de las veces que intentamos contactar con alguien en alguna web, o descargar un documento nos solicitan que confirmemos que no somos robots, para ello se sirven de letras, números o imágenes que debemos copiar o seleccionar según las características que podrían tener las imágenes.
Captcha letras y números: el más básico
Los hay de muchos tipos, los más clásicos son los de escribir unos números o unas letras para verificar que no somos bots. En muchas ocasiones, como están configurados por empresas que o no saben (o no lo quieren saber) español, pueden contener palabras que en español podrían jugar una mala pasada. Hace unos días nos enviaron por whatsapp una imagen del captcha que tenemos en la sección de contacto de nuestra web. Le sorprendió tanto que nos hizo llegar la imagen que a continuación os mostramos:
Obviamente sabemos a qué es debido, porque los códigos de este tipo suelen ser generadas por máquinas. Seleccionan de forma aleatoria letras o número que exponen en los cientos de miles de millones de formularios que se verán al cabo de día en internet, en este pues que le vamos a hacer, tuvimos mala suerte y le apareció a uno de nuestros clientes habituales.
Captcha con imágenes: la tendencia
Otros más complejos y que cada vez se llevan más son los que se componen de varias imágenes variadas y algunas con algo en común, esas son las que tendremos que seleccionar.
En algunos casos son las señales de tráfico que aparecen en forma desordenada y otras son imágenes que haya un local comercial. Nos hacen confundirlas o diferenciarlas de otras con paisajes, animales, colores…de todas las maneras influye el azar que la máquina tenga predestinado para el visitante, aunque lo que es seguro es que no aparecerán personas, se cuidan mucho de guardar la privacidad de las personas que lo utilizan. Al fin y al cabo es un mecanismo para detectar personas non gratas.
Un ejemplo visual para que os hagáis una idea mejor es el que os mostramos a continuación:
El objetivo principal de estos códigos es evitar que las aplicaciones, o robtos o software malicioso en forma de usuario, que interactúan con webs, redes sociales o foros de forma automática, no utilicen los formularios de contacto para el envío posterior de mensajes publicitarios, no puedan enviar ni utilizar ciertas aplicaciones, es decir, es una forma de protegerse contra el spam que podría perjudicar a nuestras estadísticas de la web o saturarnos el mail con mensajes no deseados.
El código captcha ¿Cómo funciona?
Se basan es un test conocido como el de Turing. Es una prueba que realizan las máquinas para demostrar que tienen un comportamiento similar al de una personas. Para los captcha se realiza a la inversa, de tal forma que si ponemos una palabra normal, sin ningún tipo de efecto, como la de la izquierda, posiblemente la máquina si es inteligente (una calculadora no vale), podrá leer el contenido, ahora bien, si la distorsionamos un poco, como el caso de los captcha más básicos y cómo figura en la parte derecha de la imagen pues ya le estamos poniendo las cosas más feas a la máquina.
En ambos casos es legible para nosotros y para la máquina no, a veces incluso nos peleamos con ellos porque pensamos más como máquinas que como personas, o se nos han olvidado las gafas y no podemos concretar lo que han escrito.
En el caso de los más complicados, los de las imágenes la forma de confundir a la máquina es mostrando imágenes visualmente muy similares entre ellas y si debemos diferenciar entre gatos y perros seguramente la máquina lo tenga difícil porque esas imágenes se van a a parecer lo suficiente para que una persona y no una máquina pueda acceder al contenido concreto.
¿Cómo crear un captcha?
Lo primero es visitar Google, o bueno más reciente denominado Alphabet, que nos permite crear uno en cuestión de minutos, luego ya el insertarlo es otro cantar, porque o conocemos el código o en el mejor de los casos el propio widget es el que nos indicará como poner la clave secreta dentro del mismo para que empiece a aparecer en contenido concreto de nuestra web.