Estas fechas, el final del verano y los principios del otoño, son muy buenas para comenzar a planificar una estrategia de cara al próximo año de comunicación. Hemos hablado con nuestra agencia de confianza y les comentamos que queremos empezar a escribir un blog. Un blog, de forma rápida, es una herramienta que permite explayarnos acerca de un tema y complementarlo con imágenes, textos, documentos o vídeos para explicar una opinión, un hecho o las bondades de un nuevo producto.
De las ventajas y lo que se debe hacer se ha hablado mucho, nos dicen que todos servimos para crear una identidad digital y si bien es cierto, porque la tecnología es para todos, las normas de conducta o el buen gusto dejan mucho que desear al visitante del blog. Puede que el contenido sea lo más pero si cometes algunos de los errores que vamos a explicar a continuación, puede llevarte al fracaso máximo y la desesperación, por eso es mejor asesorarte con un experto y dejarte guiar.
Que sepas como funciona la vitrocerámica no significa que sepas cocinar
En los comienzos del blog, no rendirse a la primera de cambio.
Cuando empezamos a crear un blog estamos más motivados que nunca, pensamos sobre los posibles temas de los que vamos a hablar a nuestros lectores, con imágenes que puedan llamar la atención además de apoyar al texto que estamos escribiendo, pero a medida que pasan los meses, esa magia casi desaparece, desaparece porque un blog es una herramienta que aporta resultados a largo plazo, hoy en día son muchos los blogs de todos los temas que nos podamos imaginar los que hablan sobre lo mismo. El número de visitas no es algo que según lanzamos nuestro blog a internet vaya a ser de más de 2000 sino que iremos ganando nuevos seguidores y suscriptores poco a poco, de una forma escalonada y porque nuestro contenido es realmente interesante.
No tengo seguidores, pues compro publicidad
Nos podríamos ayudar de publicidad si lo que queremos es conseguir unos resultados un poco más rápido, ya que el objetivo principal de la publicidad online es que hagamos clic en algún enlace de los que pone a nuestra disposición. Que nos ayudará a aumentar el número de visitas, lo que no quiere decir tampoco, que esas visitas lean el texto integro o que se conviertan en fans locos por tus opiniones. Hay que currárselo un poco más.
Sólo uso mis palabras clave
Puedes utilizar las redes sociales para difundir el contenido, eso lo hacemos todos, sin embargo, tenemos que facilitar a los buscadores que también nos encuentren. Las palabras clave pueden ayudarnos y debemos tenerlas en cuenta a la hora de escribir, pero sin basar todo nuestro texto en esas palabras clave, ni mucho menos en un blog de autopromoción con alusiones constantes de las ventajas de nuestros productos o servicios.
La autopromoción incansable
El blog no es una herramienta de publicidad, ni de clasificados, sino que es un sitio dónde contar nuestras experiencias, nuestros conocimientos y nuestras opiniones. Por eso es importante pensar en una estrategia que nos permita saber cuáles son las palabras clave por las que queremos que se acceda a nuestro contenido, porque es de utilidad y no porque sea demasiado obvio que estamos intentando vender.
Poner publicidad en todos los huecos «vacíos» del blog
Aunque no sea una herramienta de publicidad como tal, si podemos generar ingresos con la publicidad de terceros, si tenemos un volumen de visitas abundante podemos ofrecer espacios para otros a cambio de un precio que estará marcado por el número de clic o el número de impresiones. Ahora bien, debemos cuidar la estética de nuestro blog y que no se parezca a un árbol de navidad con luces intermitentes, ahuyentarás a todos los posibles visitantes y lectores del blog. Siempre con cabeza y sentido y acorde a los objetivos de nuestra empresa o a los fines laborales o personales que queramos obtener.
Todo lo que me viene a la cabeza, para el blog
Por mucho que un blog sirva para expresarnos no es sinónimo de soltar todo lo que se nos ocurre, debemos tener en cuenta las normas de la netiqueta y los calentones que nos podamos llevar por algún tema en cuestión que nos encienda. Lo mejor es contener la respiración y pensar sobre lo que queremos decir y contarlo con argumentos contundentes más que con enfados innecesarios o insultos.
¿Se puede acabar un blog?
Uno de los mayores dificultades con los que se encuentra un blogero es saber ¿cuándo deja de escribir? algunos cesan la actividad demasiado pronto por la falta de lectores, y no se acuerdan, que internet es un sitio que está hasta arriba de información, que sólo un toque personal les dará visibilidad y que esa visibilidad no llega en un abrir y cerrar de ojos, sino que hace falta tiempo y constancia y calidad en los contenidos que queramos compartir.
oh, oh, me he quedado sin ideas
Otros se quedan sin ideas para compartir, seguramente por la falta de una estrategia y una planificación que permita seguir un modelo o esquema de publicaciones que será revisado anualmente. En CactusCom por ejemplo, creamos una plantilla compartida en el que explicamos en qué tiempos se publicará qué contenido, a veces lo creamos nosotros y otras son los clientes quiénes lo hacen y sólo revisamos los textos y les guiamos en como hacer de su blog un canal de comunicación con personalidad y con unos objetivos que cumplir.