Acumulamos las cosas que no utilizamos, ropa que no nos sirve o que ya no nos gusta…llega el verano y parece que es el momento de deshacerse de ella, ¿cómo podemos vender lo que ya no queremos?
Existen multitud de aplicaciones que nos permiten la venta de artículos de primera y segunda mano que no queremos o que preferimos cambiar, las que más se utilizan son:
Wallapop
Wallapop es un aplicación que tiene más de 7 millones de descargas y nos permite comprar o vender artículos de casi cualquier temática que necesitemos, el uso es bastante sencillo, creamos una cuenta y podemos ver los productos que están en venta, podemos filtrar por el lugar en el que nos encontramos para evitar los molestos gastos de envío. Subir un producto es bastante sencillo, hacemos unas fotos, ponemos una pequeña descripción y añadimos un precio. Existe un chat en el que podremos negociar o concretar la recogida con el vendedor o el comprador, algo muy en común en esta aplicación es regatear. Muchos ofrecen también trueques, que a veces pueden ser la clave para deshacernos de algo que no queremos. Lo bueno de Wallapop es que no se lleva ninguna comisión por transacción como otras apps de las que os hablaré a continuación.
Vibbo
Otra de las aplicaciones de más uso es Vibbo, más conocida hasta hace unos meses como segundamano.es que cambió de estrategia de comunicación: cambio el nombre y el logotipo para acercarse a un mayor número de usuarios, es quizá de las que más usuarios y variedad de artículos, ofertas de trabajo o venta de inmuebles tiene en su galería de «se vende», pero también en la que es menos probable certificar si el perfil de la persona que vende es real o no. Es la plataforma de venta de segunda más antigua y con más usuarios. Al cambiar de nombre abarcar un público más joven.
Chicfy
Chicfy es una aplicación que nos permite vender la ropa y complementos que ya no necesitamos, la desventaja principal con Wallapop es que en esta red si tenemos que pagar un 20% de comisión por cada venta lo que garantiza que se va a cobrar y se va a enviar lo que hayamos comprado. El comprador debe hacerse cargo de los gastos de envío que, por otro lado, son bastante asequibles 1,45€. La ropa y complementos que nos podemos encontrar son principalmente de marca a precios más bajos que en las tiendas. Para recibir el dinero hay que esperar que pase el mes, y con todo lo que hayas vendido menos el porcentaje correspondiente recibirás un ingreso en tu cuenta el día 10 del mes siguiente.
Mientras que en las otras redes sociales no necesitas poner un importe mínimo de venta para hacer cualquier transacción en Chicfy son 4€ si quieres vender otras cosas más baratas lo que puedes hacer son lotes que sumen hasta los 4€.
Y para bebés también hay tiendas de segunda mano
Otro mercado de segunda mano en auge son los artículos para bebés, desde carricoches, pasando por juguetes y llegando a la ropa o el calzado, que tienen muy poco uso y suelen estar en muy buenas condiciones. Una de las más nuevas es la app de Pequefy, propiedad de la malagueña Chicfy pero cuyo público y temática es muy específico. Hay ropa y complementos hasta niños y niñas de 14 años.
Es una plataforma que ha crecido exponencialmente ya no sólo por la demanda de artículos de bebés, sino también porque tiene a sus espaldas la experiencia de Chicfy y la satisfacción de los usuarios.
Y ¿Cómo podemos hacer para que no resulte ser un timo lo que estamos comprando?
La mejor opción es que la compra se haga de forma presencial, pagarlo tras comprobar que está en las condiciones que se había anunciado (si no funcionaba en el anuncio tampoco podemos esperar que lo haga cuando lo vamos a comprar, un poco de sentido común) o pagar contrareembolso. En plataformas como Chicfy el que retengan el dinero durante casi un mes permite que si el comprador no está conforme con la transacción o la compra tendrá que devolverla y por tanto le devolverán el dinero.
Los anuncios que tienen muchas faltas de ortografía o palabras mal traducidas suelen ser bastante sospechosos, lo que puedes hacer es hablar con la persona por teléfono comprobar su perfil en la plataforma que estás comprando, cuánta más información tenga disponible y menos inconvenientes para charlar contigo acerca del producto, más verídico será.
Cuándo vamos a comprar algo, sabemos más o menos el precio que tiene de venta, si no lo conoces, mira previamente en los artículos de primera mano, el precio será más bajo, pero tampoco te creas que se venden duros a 4 pesetas. Comparar en internet además es muy sencillo con la cantidad de comparadores que existen para casi todos los tipos de productos.
Para el envío de dinero utiliza sistemas que puedan garantizarte la devolución. Empresas como wester union o money gram no se responsabilizan de los desperfectos o el timo que te hayan podido hacer.
Por último, desconfía de los anuncios con fotos que estén photoshopeadas, que no parezcan reales o que sean de super catálogo. Y, si tu eres el que vende haz fotos caseras en las que se vean perfectamente el estado del producto que estás vendiendo.