Los relojes inteligentes nos permiten conectar en la muñeca información de nuestras constantes vitales y lo que ocurre en internet. Más del 80% de la población se conecta a internet a diario, de los cuales un gran porcentaje lo hacen a través de dispositivos móviles e inteligentes varias veces al día.
La industria tecnológica nos ha servido en bandeja aparatos que se supone nos hacen la vida más fácil, bueno pensando mejor, más rápida y conectada. La moda está viendo filón en este tipo de aparatos cotidianos como es un reloj y se crean diferentes modelos desde los que dan la hora solamente hasta los que te permiten trabajar con ellos, en esta ocasión probamos el Apple Watch.
Apple watch + iPhone actualizado
El Apple Watch es un reloj que vale unos 400€ el más barato y con las calidades menos altas, los hay hasta de millones con engarces de oro o diamantes, para gustos y bolsillos los colores, sin embargo lo que es en sí la máquina, el cómo funciona es igual para todos.
Si queremos utilizar un Apple Watch debemos tener en cuenta que necesitamos un iPhone actualizado (ni el 4 ni el 4s valen para la hazaña), lo primero que nos pregunta es cómo queremos ponerlo en la muñeca, tiene cuatro posturas diferentes según seas diestro o zurdo y dónde quiera el botón, que más de una vez al día tendrás que pulsar.
Empieza la conexión
El siguiente paso es sincronizar el reloj con el teléfono con algo de seguridad a través de un código que se muestra en la pantalla del reloj y debemos leer con el teléfono, muy similar a un QR. Desde el iPhone, en la app de Apple Watch, podemos configurar de una forma más extensa nuestras notificaciones y aplicaciones, además encontraremos una tienda en la que podremos ver algunas app que se han creado específicamente para el reloj.
Las aplicaciones, ¿funcionan diferente?
Aplicaciones hay de todo tipo, desde las que complementan las lecturas de las constantes vitales, las redes sociales, la bandeja de entrada, de control de actividad deportiva, ver el tiempo o incluso para llevar un seguimiento de los períodos menstruales de las mujeres, sin embargo funcionan diferente a las del móvil o las del navegador, es normal, son aparatos muy diferentes.
Me llamó la atención que Whatsapp no exista como aplicación, no vemos el icono en la pantalla, sin embargo, cada vez que recibimos uno, nos aparece en la pantalla del reloj el contenido de texto, las imágenes o los vídeos tendremos que ir a la aplicación del móvil o al navegador web para que lo muestre. Nos da una serie de palabras rápidas para contestar o la posibilidad de transcribir con nuestra voz un mensaje personalizado, que reconoce bastante bien lo que has dicho.
En Twitter, aunque tenga la app disponible las opciones que nos muestra son demasiado escasas para lo que estamos acostumbrados, cuando nos llega una mención podemos marcarla como FAV o hacer un RT. Y para Facebook sólo está disponible la app de chat que funciona muy similar a la de Whatsapp.
También otro tipo de aplicaciones que nos permiten ver, por ejemplo, a qué horas está baja o alta la marea de la ciudad que configuremos en nuestra aplicación. Por lo general los ajustes específicos de las aplicaciones debemos hacerlos desde el móvil, ya que en el reloj, son más bien simplificadas para obtener el mayor rendimiento.
Las ventajas
Una de ellas es que si estás por la calle, no tienes que sacar el móvil con girar la muñeca hacia los ojos veremos que es lo que está pasando. Y con el aumento de los robos de las manos del dispositivo, estaremos complicando la existencia a los cacos ¡qué se jodan!
Si vamos a hacer deporte nos estará midiendo desde nuestra muñeca lo que hemos recorrido, lo que hemos quemado o si hemos finalizado el objetivo marcado. Si el deporte se práctica en una instalación cerrada además podremos estar haciendo deporte sin el móvil encima.
En una pantalla pequeña vemos mucha información, dependerá un poco de lo que nos guste ver para que salga una u otra cosa, pero información como la temperatura que hace, la hora, la puesta del sol o los eventos de la agenda son algunas de las opciones.
Los incovenientes
A veces, miras la muñeca y piensas ¿no están espiando?, te sientes un poco invadido por la tecnología.
Es un producto que todavía es caro para la compra, aunque viendo la evolución de la compañía quizá nunca baje de precio.
Hay que cargarlo todos los días, lo bueno es que el soporte dónde se hace es cómodo, es un círculo en el que apoyas la esfera del reloj.
Se conecta con el móvil a través de bluetooth lo que significa que tendremos que tener el móvil cerca para que funcione como algo más que dar la hora.