No nos vamos a engañar quien más quien menos que se ha iniciado en una actividad empresarial sabe, porque ha ido a cursos, conferencias o charlas, que tienen que estar presentes en las redes sociales, que deben publicar lo que hacen en el día a día, que deben subir fotos de sus productos, o crear newsletters a sus clientes, pero en realidad ¿Cuántos emprendedores usan de forma eficiente las redes sociales?
Al principio eran las páginas amarillas, después las webs y ahora las redes sociales, eso lo tenemos todos claro. Hubo un boom en el que los comerciales llenaban la cabeza de pajaritos a los dueños de los negocios, que «te tienes que hacer una web, que sino no existes, que yo te la hago muy barata», «que me la hace mi cuñado», que bueno, que al final tenían una web más o menos cara…¿a qué precio?
Muchos de los que hace 10 años crearon su primera o, en algunos casos, la segunda versión de la web están orgullosos de ellas, y es normal, se supone que una web es el escaparate de nuestro negocio en internet, que sirve a los que no nos conocen y llegan a nuestra web les atraiga lo suficiente como para buscar de una forma sencilla la información que necesitan de esa web.
La realidad dista mucho de la teoría, en negocios locales con trayectorias entre 10 y 25 años de experiencia en el mercado, de empresas pequeñas hasta 25 empleados máximo o micro-pymes de 1 ó 2 empleados o socios, que siguen su actividad profesional tienen webs obsoletas que no representan lo que son.
Tienen webs que algún día le hizo alguien y que nadie nunca más se encargó de actualizar, no se trata tampoco de tener una web tan compleja como las de los ministerios, pero igual que adornamos los escaparates a pie de calle, para que los clientes puedan ver parte de nuestro catálogo, ¿por qué no la web? O ¿Las redes sociales?
La web, puede que sólo queramos, que actúe como tarjeta de visita, la dirección, el logo y las formas de contacto, porque no tenemos los recursos o el tiempo necesario para crear una web con más información o mayor dinamismo. En ese caso, con algo sencillo y bonito podemos dejarla hasta que cambiemos, si lo hacemos, la imagen corporativa de la empresa.
En cuanto a las redes sociales, no podemos permitir crear un perfil y no actualizarlo o hacerlo sólo con documentos o información autopromocionales, porque a la gente le huele raro.
Puedes pensar, bueno pero para que quiero yo que alguien me encuentre en internet, si mis clientes sólo son los del barrio…eso es encerrarte en ti mismo, es como si te haces ermitaño y sólo te ve aquel que ya te conoce, puede que haya gente de barrios colindantes que estén buscando lo que tu vendes, o que una de tus clientas habituales, se rompa una pierna y busque el teléfono en internet para hacerte un encargo, pero como no estás se fue a la competencia…normal, la gente quiere y busca facilidades.
De poco sirve por ejemplo, si estamos presentes en las redes sociales y tenemos perfiles en todas las que hemos escuchado por ahí que tiene que estar todo negocio, si de repente un día alguien nos envía un mensaje para pedir presupuesto o solicitar información de nuestros productos o servicios y no lo vemos hasta pasado un mes….pues vaya tela, no estoy diciendo que tengamos que ser esclavos de las redes sociales, pero si lo tenemos debemos atenderlo.
Se puede por ejemplo comparar con las plantas: nos la compramos (creamos el perfil en las redes sociales), buscamos una ubicación que tenga protagonismo en la casa (ponemos nuestro perfil bonito), nos informamos de cómo tenemos que cuidarla (aprendemos el funcionamiento básico de la red social), la cuidamos (actualizamos con noticias, publicaciones..) y si no hacemos el último y más importante de los pasos, cuidarla se acaba muriendo, en el caso de las redes sociales son los propietarios de las mismas quiénes borran cada cierto tiempo cuentas o perfiles inactivos durante largos periodos de tiempo, porque para qué quieren perfiles que nadie usa.
Y todo el esfuerzo anterior, no habrá servido para nada, bueno si, para que algunos piensen o puedan creer que el negocio ha cerrado o no existe o ha cesado su actividad.
Si tienes alguna pregunta sobre cómo actualizar la web o cómo gestionar las redes sociales, ponte en contacto con nosotros en este link para solicitar más información.
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