Las redes sociales son plataformas rápidas, en las que alguien comparte una noticia, un estado o una opinión y de repente se ve abrumado por los comentarios negativos o los positivos sobre lo que ha compartido.
Una noticia que se vuelve viral como la muerte falsa de alguien, o un post que parece serio y en realidad es una noticia irónica o sin sentido pueden hacernos perder parte de nuestra notoriedad en la red.
Cuando hablamos sobre un tema, debemos estar seguros sobre lo que estamos opinando, debemos ser capaces de saber rebatir con argumentos razonados y razonables también nuestras opiniones o hechos, las redes sociales están habitadas por personas muy muy dispares, nos podemos encontrar con gente a nuestro favor y también en nuestra contra o con visiones intermedias sobre un aspecto concreto.
El alcance de lo que decimos
Los comentarios de algunos famosos han salido hasta en los telediarios por su falta de sentido, su incongruencia o porque no pintaba nada en sus perfiles. No es que debamos ser muy estrictos con lo que vamos a publicar, es decir, no debemos coartarnos si queremos expresar nuestro punto de vista, sin embargo, debemos hacerlo con una serie de pautas que nos ayudarán a generar confianza y comunidad con nuestros lectores/seguidores/suscriptores.
Una de las primeras premisas que debemos tener en cuenta cuando compartimos algo, lo que sea, en los perfiles es la ortografía, más cuando estos perfiles los utilizamos para generar nuestra reputación profesional digital, lo que es lo mismo, que nuestra marca personal o estamos levantando o gestionando la imagen de un negocio en las redes sociales. Según el tipo de faltas de ortografía que cometamos seremos más o menos criticado, nos tomarán menos en serio.
Como lo compartimos
Si bien es cierto, algunos dicen que el uso de los smartphones está ayudando a perder la riqueza del diccionario, expresiones y las palabras que se han cortado (por lo de aprovechar el espacio). Si queremos explayarnos sobre un punto de vista, podemos utilizar diferentes herramientas para comunicarlo, desde un post en el blog, una infografía que resuma la información que queremos mostrar en forma de imagen o incluso un podcast que podremos subir en alguna web online como Soundcloud o Ivoox, os dejamos uno de ejemplo en el que participamos
Agudeza mental
Otras de las premisas es la capacidad de responder a los comentarios (positivos o negativos) que otros realicen sobre nuestras publicaciones. Las redes sociales son muy ágiles y si somos una marca que se está comunicando a través de ellas, debemos tener la capacidad de contestar o debatir con otras marcas o usuarios sobre los temas que nos interesen, y además hacerlo en un período corto de tiempo, no podemos esperar un mes a que se nos ocurra una respuesta y escribirla, eso lo único que demostraría es que «pasamos de las redes sociales» y es la última impresión que queremos que tengan de nosotros si somos una empresa. Esto dará que pensar.
Revisar y preveer
Si bien hay que pararse a releer lo que escribimos en un blog, también deberíamos hacerlo cuando publicamos algo, lo que sea en nuestros perfiles sociales. Tenemos que pensar en un plan de social media en el que además del tipo de publicaciones, la periodicidad o el formato del contenido tengamos previstas una serie de posibles situaciones contrarias a nuestra forma de pensar, situación que podrían darse y que no sean demasiado postivas para nosotros, un plan de contingencia, que en el caso de ocurrir algo estuviera previsto y sepamos como darle la vuelta para no acabar siendo el meme del año.
Todos podemos cometer un error. ¡Que se lo digan al rey!
Aún siendo previsores puede ocurrir que metamos la pata, no pasa nada, todos somos humanos y quizá el primer paso para esto es pedir disculpas a las personas que se hayan podido ver afectadas, ya no en las redes sociales, sino también en algunas comunicaciones que hagamos, comentarios en público o fotografías que jamás debimos subir.
¡Me quito de las redes sociales! no, eso no es necesario, no es para tanto.
Sea como fuera, lo mejor es siempre ser natural y sincero, natural porque debemos ser capaces de expresar lo que nos preocupa, nos interesa o motiva sin faltar el respeto a nadie, y sinceros, porque sinos equivocamos debemos reconocer los errores y aprender de ellos. Aprender a debatir y dialogar sin caer en los insultos o las vejaciones.
Si tienes un perfil profesional o comercial en las redes sociales presta atención a la ortografía, crea un manual de uso y manejo de tu marca personal o empresarial para las redes sociales y antes de pulsar compartir o publicar revisa el contenido ¿se entiende? ¿ofendo a alguien?, si alguien no está de acuerdo ¿cómo solvento la situación crisis?
Sabemos que esto de las redes sociales cada día se complica más, es más grande el conglomerado y todos queremos tener un trozo tarta, para conseguirlo el trabajo diario y la disposición te pueden ayudar, y sino, siempre nos puedes escribir para que te echemos una mano 🙂